2015, el año de la transformación
2015, el año de la transformación
Aquello que somos debe resonar en aquello que parecemos. En lo que comunicamos y aportamos cada día para que la marca siga siendo coherente, líder y referente. Por ello y dado que en ONA nunca hemos dejado de evolucionar para diferenciarnos, en 2015 decidimos reenfocar la marca desde la estrategia, el diseño y la narrativa con el objetivo de transmitir lo que somos y hacemos al mundo de una manera significativa y honesta. Transformamos nuestra imagen apostando por un logotipo atemporal, sencillo y versátil que buscaba comunicar, con un primer impacto, quiénes y cómo somos. Un logo tipográfico que transmite vanguardia, que integra de manera orgánica un rayo minimalista y asocia a ONA directamente con su actividad; la electroerosión.
Esta evolución estratégica tuvo consigo un cambio de tono, de mensaje. Apostamos por un claim que hablaba de una declaración de intenciones para una nueva etapa: WE ARE EDM. Una traducción conceptual de nuestra esencia de marca. Un mensaje directo y transparente que transmite aquello en lo que creemos y aquello en lo que somos pioneros y expertos. Nuestra razón de ser, la clave de nuestro éxito.
Creamos así una marca envuelta en tres colores clave: rojo, gris antracita y blanco puro. Personalidad, energía, pureza, precisión y técnica pintaron una nueva andadura para ONA. Todo ello acompañado de un estilo fotográfico limpio, sutil y minimalista, con el que se buscaba mantener tonalidades neutras dando protagonismo al producto de forma elegante y estética.
2015, una nueva etapa que abrió miles de nuevas oportunidades a ONA e impulsó a la marca a seguir evolucionando, adaptándose y progresando al mismo tiempo que lo siguió haciendo el negocio y nosotros. Abrazando, hasta día de hoy, el cambio y la adopción de nuevas ideas, y a la vez, manteniendo siempre su esencia.